Los Chakras o Centros Energéticos son parte de nuestro cuerpo de energía. Son la conexión de nuestro cuerpo físico con el campo de energía universal. Tenerlos en buen estado, refleja el equilibrio en el ámbito mental, físico y emocional de nuestra vida.
Me he encontrado un libro que por su lenguaje sencillo, le puede ayudar a cualquier persona, tenga o no conocimientos en este tema. Chakras de Marian de Llaca. «Deseo que este recorrido por los chakras se convierta en una herramienta que apoye tus prácticas cotidianas para que tu camino sea más pleno y disfrutable. Lo más sencillo es empezar, el reto es sostenerlo paso a paso en un nuevo estilo de vida». Marián de Llaca Chakras es el resultado de 30 años de investigación, estudio y práctica terapéutica en donde Marián de Llaca sostiene que este conocimiento no es exclusivo de India, sino un saber compartido por las diferentes culturas del mundo. Por eso, cada capítulo está aderezado con simbología mexicana prehispánica con la intención de abrir un camino que permita al lector ampliar la visión que hasta ahora ha tenido sobre el tema. El libro está acompañado de una serie de acciones prácticas llamada disciplina sagrada para apoyar la transformación en la de vida de las personas. Asimismo, propone el fortalecimiento de la energía del ombligo como un chakra fundamental para la salud y el equilibrio del organismo.»
Hoy, más que nunca, la limpieza se ha hecho necesaria en nuestra vida diaria.
Pero el tipo de limpieza al que me refiero es algo más que agua y jabón. Es una limpieza más profunda, una limpieza en nuestro estilo de vida..
Por el hecho de “andar a las carreras” y «obtener las cosas de forma rápida”, introducimos químicos tóxicos en nuestros cuerpos como nunca antes. No es que estemos colocando estas toxinas en nuestro cuerpo a propósito, sin embargo, la sociedad ha desarrollado, en torno al ritmo acelerado, rutinas frenéticas, métodos de producción baratos, y respuestas rápidas y superficiales que están creando más problemas de intoxicación que soluciones.
Aquí están algunos ejemplos de los tóxicos antropogénicos (hechos por el hombre) y naturogénicos (creados por la naturaleza) a los que me refiero.
Productos químicos tóxicos
El aire que nos rodea está lleno con muchas formas de productos químicos tóxicos, todo, desde cigarrillos de segunda mano hasta humo de gas radón. Pasamos mucho tiempo dentro de nuestros hogares y automóviles, lo que nos expone a una gran cantidad de humo, gases, químicos en productos de limpieza y de uso personal, liberación de gases de alfombras y tapicerías. Así como la contaminación ambiental de todo tipo de fábricas y la lista puede seguir.
Pesticidas e insecticidas en nuestros productos
Nuestros supermercados están llenos de frutas y verduras que se cultivan con la «ayuda» de los plaguicidas. Según la Organización de la Salud del Consumidor, un producto químico, el metil paratión, representa más del 90 por ciento de la carga de la toxicidad total de melocotones, manzanas, peras, judías verdes y guisantes. Los valores de máxima toxicidad en la calabaza de invierno de los EE.UU. son casi en su totalidad debido a los residuos de dieldrina, una sustancia muy tóxica.
La Dieldrina es un insecticida cancerígeno que fue prohibido hace 25 años, pero
persiste en algunos suelos agrícolas.
Hormonas y antibióticos en nuestro ganado
No sólo
son nuestra carne, pollo, y carne de cerdo son alimentados
con alimentos que contienen pesticidas y antibióticos.
También se les da hormonas para engorda antes de ser enviados a
los mercados. Es por esta razón que muchos países prohíben
la importación de EE.UU. de carne de res.
Los medicamentos recetados
Las personas cada vez dependen más del uso de fármacos. El número de recetas prescritas cada año en los Estados Unidos de Norteamérica, se ha incrementado a un ritmo alarmante. La ironía de esto es que estos medicamentos se toman para que el paciente esté más saludable, sin embargo, las personas están más enfermos ahora más que nunca.
Alcohol, tabaco, productos químicos en las gaseosas dietéticas, etc
Si nos remontamos mil años atrás, la gente nunca tuvo que lidiar en su vida cotidiana, con ninguna de estas toxinas creadas por el hombre, por lo que la necesidad de desintoxicación era mucho menor. Pero las cosas son diferentes hoy en día, y nuestros cuerpos están saturados con un lodo tóxico al igual que un estanque cerca de una fábrica de productos químicos.
Las toxinas que ingerimos todos los días arrastran a nuestro cuerpo en un proceso conocido como la «carga corporal». Esta es la causa de muchas alteraciones del sistema inmunológico, deficiencias nutricionales, alergias, un metabolismo deficiente y acidosis metabólica.
La desintoxicación y el ayuno son procesos que dan al cuerpo un descanso, la posibilidad de eliminar todos los productos químicos fuera del estanque (en este caso de nuestros cuerpos) y así permitirle llenarse otra vez con nutrientes puros, suficientes para reducir la carga del cuerpo.
Vale la pena echar una revisada a la lista de productos que intoxican nuestro cuerpo, ir eliminándolos de la lista, es una idea inteligente que nos va a beneficiar a corto y largo plazo.
Algunos beneficios de la desintoxicación: – Mejorar nuestro sistema inmune – Aumentas notablemente tu energía vital – Te permite bajar de peso fácilmente – Evitas el envejecimiento prematuro
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